¿Qué es el design thinking?
¿Qué es lo que tomas en cuenta a la hora de crear un producto o servicio nuevo? Sin duda que se te viene a la mente algo como que enamore a tu público, que sea innovador o que resuelva ayude a resolver alguna necesidad.
¿Y cómo saber qué es lo que necesita tu cliente? Empatizando con él y para ayudarte con este punto existe una técnica denominada design thinking, la cual es fundamental dentro de tu departamento de diseño para poder competir en el mercado y, sobre todo, para entender lo que tu público busca y espera de ti como empresa.
¿De qué trata?
El design thinking es nombrado como una metodología de trabajo, pero es más que eso, es una forma de pensar que tiene el objetivo de resolver problemas complejos que presentan los clientes potenciales y que se orienta más a la acción, al proponer avances hacia la creación de escenarios futuros óptimos.
Este proceso creativo lo que pretende es identificar todos los pain points que manifiestan los usuarios finales con respecto a un servicio, producto o una situación real y de acuerdo a esto, ofrecer una solución correcta.
Fases del design thinking
Para poder comprobar cuáles son las necesidades reales de tus clientes y determinar cuál es la solución más viable y correcta se necesitan seguir ciertos pasos establecidos en esta metodología.
Momento de empatizar
Gran parte del éxito del design thinking recae en el ponerte en los zapatos de tus clientes y entender a fondo cómo es que piensan y actúan a la hora de buscar una solución ante un problema o necesidad.
Para ello puedes apoyarte en entrevistas, realizar encuestas de satisfacción, procesos de escucha social, entre otras actividades que te permitan conocer de primera mano lo que opinan tus clientes.
Define el problema
Una vez que tengas claro el problema es hora de identificar el punto de acción para dar una solución pronta y efectiva a tu cliente.
En esta fase ayuda el crear un buyer persona y el buyer journey para identificar sus características, su comportamiento y en qué momento es donde aparece el problema de nuestro cliente.
¿Cómo dar solución?
El siguiente paso del design thinking es proporcionar ideas para resolver el dilema del usuario, por lo que un brainstorming es una gran opción. Fomenta que todo el equipo participe con ideas sin importar lo alocadas que sean; todas las aportaciones son válidas y valiosas en este punto.
Posteriormente, analiza las propuestas y selecciona las mejores y más viables para poder seguir con el proceso.
Crea un prototipo
Una vez que selecciones una idea, es momento de hacer un prototipo que te permita evaluar la eficiencia del producto o servicio al resolver el problema del cliente, sin tener que realizar una gran inversión y teniendo un margen de error para trabajar en mejoras antes de salir al mercado.
Tiempo de pruebas
Selección un grupo de personas que te apoyen con las pruebas, puede ser incluso de tus clientes más fieles y dales a probar el prototipo creado con fin de comprobar que este resuelva el dilema que presenta el grueso de tus clientes.
En este punto es de suma importancia que seas muy receptivo y escuches todas las opiniones, tomes nota y corrija lo que haya que corregir antes de lanzar tu producto final al público.
Ten en cuenta que un producto o servicio puede tener un grupo muy variado en cuanto a público se refiere, y que algunos presenten necesidades diferentes a resolver, es el reto que se tiene en el design thinking, dar una solución creativa y funcional que ayude a la mayoría de tus seguidores.
También te recomendamos que siempre tengas la mente abierta durante el proceso, pues nunca sabes si la idea más loca sea la ideal para solucionar un dilema y enamorar a tu público.
